Hostales en Extremadura

Extremadura (literalmente, "extremo duro") es una comunidad autónoma en la parte occidental de España con una larga y variada historia. Originalmente capital de la pequeña provincia romana llamada Lusitania, fue una de las ciudades integrales que componían el Imperio Romano, ya que era un centro de comercio, industria y negocios. Más tarde cayó bajo el dominio otomano durante el período andalusí (alrededor de los setecientos), hasta que pronto fue entregada al dominio cristiano a principios del siglo XVI.

Debido a su diverso trasfondo histórico, Extremadura es un hervidero de variaciones culturales que se refleja en su cocina, su arquitectura e incluso su lengua. Hoy en día, Extremadura es conocida principalmente por sus estructuras históricas y por sus antiguas carreteras, que siguen siendo completamente funcionales y prácticamente sin cambios hasta el día de hoy, lo que provoca una forma de vida única endémica de la zona. Cuando te encuentres en Extremadura, sin duda te enamorarás de la arquitectura histórica, la más popular de la cual son las bien conservadas (y a veces incluso restauradas) estructuras de la época del Imperio Romano ubicadas en la capital de la ciudad, Mérida.

Otras maravillas arquitectónicas e históricas como la ciudad amurallada de Cáceres (que tiene un hostel) muestran influencias de la arquitectura morisca combinadas con estilos cristianos posteriores que realmente hacen un festín visual deslumbrante y hermoso. Si te inclinas hacia el lado más artístico de las cosas, una rápida visita a la Iglesia de Santa María la Mayor con su colección de pinturas del siglo XV realizadas por maestros locales debería ser más que suficiente para saciar tu sed de arte. Para una verdadera inmersión en el pasado de la ciudad, un recorrido por el "pueblo fantasma" de Granadilla y el antiguo Barrio Morisco es imprescindible. Dos pequeñas áreas que hasta el día de hoy preservan el antiguo estilo de arquitecturas rurales, es un viaje al pasado para historiadores aficionados, académicos, artistas y fotógrafos por igual.

Comer en Extremadura es en sí mismo una joya, con literalmente más de cien restaurantes que sirven comidas tradicionales, contemporáneas o "modernas" para todos los paladares. Uno de los mejores lugares para comer en Extremadura es Atrio, un increíble restaurante con un gran ambiente, comida aún mejor, personal amable y capacitado, y un gusto impecable por la decoración. Si buscas algo menos elegante pero igual de sabroso, Madruelo y La Minerva -- dos pequeñas joyas -- son definitivamente donde deberías estar.

Asimismo, encontrar un hostel en Extremadura es fácil, con raras y maravillosas gemas encontradas en toda la región. Se recomienda reservar tu habitación antes de tu viaje, aunque incluso reservar habitaciones durante la temporada alta no es realmente tan difícil.